Hace tiempo hice un post con videoclips en plano secuencia a partir del año 2000 (y pronto lanzaré otro). La técnica del plano secuencia consiste en grabar una escena durante mucho tiempo, sin cortes. Aunque no existe una medida exacta de cuánto tiene que durar un plano secuencia, vamos a considerarlos de 40s. En el campo de los videoclips, encontramos algunos que son de varios minutos sin cortes, pero un plano de 40 segundos está muy bien también y tiene mucho mérito. Si observamos muchos de las películas, series o vídeos musicales hoy en día, la mayoría de los planos suelen ser muy cortos, menores de 10 segundos.

Este tipo de planos suelen dar dinamismo a la acción que representa, y consiguen que el espectador se adentre aún más en el mundo que el director nos está transmitiendo. Hace que parezca que el espectador participe. Suele mostrar acciones en tiempo real, aunque puede que con técnicas más modernas y efectos digitales encontremos algunos planos en los que se representen acciones a lo largo del tiempo, ya sean días, semanas o incluso años.

Para conseguir grabar este tipo de planos, se necesita una enorme planificación, ya que tiene que estar todo medido al milímetro y muchos ensayos, porque nadie involucrado en la escena puede equivocarse en lo que hace. Imaginad, todo se tiene que grabar de una sola vez, en cuanto alguien se confunda, entre a destiempo o cometa un error hay que volver a repetir. Afortunadamente, con la introducción de los efectos digitales se pueden hacer cortes en la grabación que sean casi imperceptibles por el espectador, pero requieren igualmente mucha planificación.

Años 90

La mayor década de oro en ese sentido fueron los 90. Empezaron a verse más y más efectos digitales, era mucho más barato que en décadas anteriores y muchos directores desplegaron su creatividad en aquellos años. Podemos ver grandes obras de arte en este sentido. La película virgen es más barata, hay más variedad de equipos de grabación y, además, en muchos estudios se empiezan a utilizar soportes más baratos que el celuloide para grabar. En la actualidad se suele utilizar casi siempre un soporte digital para grabar, incluso el cine. En los 90 se empezaban a ver ese tipo de soportes. Aunque los más puristas siempre han preferido grabar en cine (un formato fotoquímico), luego telecinar, es decir, obtener cada fotograma en un formato electrónico (analógico o digital), luego etalonar (corregir el color), montar y tras ello volver al formato cine. El proceso completo puede llegar a ser muy caro.

No me enrollo más, aquí un listado de todos los videoclips que recuerdo de aquellos años, y que he encontrado buscando en Internet, para que los disfrutéis. Por supuesto, abajo en los comentarios me podéis dejar los vídeos que se me hayan pasado (que seguro que son muchos).

Michael Jackson – Black or White (1991)

Empiezo haciendo trampa… es un vídeo con un plano al final del vídeo, donde vemos la técnica de morphing utilizada para cambiar entre las caras de los bailarines. Tenemos casi 50 segundos de un plano con cierta continuidad hecha con efectos digitales. Y, el vídeo para ser de 1991 es una pasada.

Guns ‘n Roses – Garden of Eden (1991)

Massive Attack – Unfinished Sympathy (1991)

En el 1991, con mucho travelling de cámara, y mucho ensayo para que todo salga bien.

Primus – Mr. Krinkle (1993)

Una locura de vídeo con muchos efectos físicos y mucha gente. Todos corografiados.

Nine Inch Nails – March Of The Pigs (1994)

Die Krupps – To The Hilt (1994)

Muy loco, con movimientos de cámara que esconden en cierta manera los cortes, pero no pierde la sensación de continuidad.

Gin Blossoms – Allison Road (1994)

Una cámara que no para de enfocar televisiones escacharradas. Podemos pensar que, ya que las televisiones no se mueven y muchos objetos son estáticos, hay sitio para dar cortes. Pero la sensación general está chula.

Tony Braxton – Another Sad Love Song (1994)

No es toda la canción de golpe, cuenta con planos muy largos, el primero con más de minuto y medio de duración.

Weezer – Undone (1994)

Con perros, o semovientes, que, por supuesto hacen el rodaje más complicado. Y una cámara que no deja de dar vueltas.

Tom Petty – You Don’t Know How It Feels (1994)

Otro más que no deja de ser curioso.

Massive Attack – Protection (1994)

Un fantástico vídeo en el que la cámara se cuela entre paredes rotas, ventanas y huecos de ascensor. Seguro que en la grabación hubo cortes, ya que cada elemento está bien diferenciado, pero el resultado final es un vídeo en una sola toma.

Lucas – Lucas with the Lid Off (1994)

Aunque lo veamos en blanco y negro, es de mediados de los 90, mezcla movimientos de cámara vertiginosos con algunos efectos digitales para hacer que las transiciones sean suaves y no se noten cortes.

Wax – Southern California (1995)

¡Una cámara lenta! ¡Lo que nos faltaba! Aunque parezca que así cualquiera consigue rellenar casi 2 minutos y medio de vídeo. Todo esto tiene una cierta planificación, hay que controlar el travelling y el movimiento final de cámara que puede tener un posible corte… y toda la gente que sale detrás.

Lisa Loeb – Stay (1995)

No se ha grabado de una sola vez, pero introduce muy bien efectos de montaje en este sentido. Por ejemplo, cada vez que la cámara pasa por una columna, o una pared se puede haber hecho un corte. Pero contamos con muchos movimientos de cámara que no están mal.

Alanis Morissette – Head Over Feet (1995)

Cibo Mato – Sugar Water (1996)

Un videoclip que no sólo está grabado en una sola toma. Vale, sí, hay algunos cortes en el vídeo… los podemos apreciar en ciertas zonas

Madonna – Love Don’t Live Here Anymore (1996)

Jamiroquai – Virtual Insanity (1996)

La sensación de continuidad se hace con movimientos de cámara, pueden parecer un poco bruscos y automatizados, pero con el resto del vídeo quedan bien. Así podemos dar cortes sin que se note.

Spice Girls – Wannabe (1996)

Si os fijáis, hay un pequeño corte, pero es complicado cuando se trabaja con mucha gente.

Daft Punk – Fresh (1997)

Ben Folds Five – Kate (1997)

Greenday – Redundant (1997)

Un vídeo donde vemos chromas, mucha gente y muchos elementos de composición.

Michael Penn – Try (1997)

Otro videoclip más. La sensación es de una sola toma, aunque podemos ver que se han hecho algunos cortes junto con algún movimiento de cámara o cuando se enfoca una foto del cantante con la cámara.

Erykah Badu – Other Side Of The Game (1997)

Björk – Hunter (1997)

Mezclamos un vídeo en plano secuencia con los efectos digitales de la época. Recordemos que es 1997 y estamos lejos del fotorrealismo, aún así, se utilizan técnicas de tracking 3D para acoplar modelos 3D al rostro de la artista. La técnica es muy utilizada hoy en día.

No surprises – Radiohead (1997)

Un clásico.

Fiona Apple – Never Is A Promise (1997)

The Verbe – Bitter Sweet Symphony (1997)

No está grabado en un solo plano, pero suelen ser planos largos. Los primeros 45 segundos del vídeo son sin cortes.

Xzibit – What U See Is What U Get  (1998)

Sensación de continuidad, aunque los cortes cantan mucho. Se notan demasiado, de todas formas, no por ello va a desmerecer el mérito de estar en esta lista.

Semisonic – Closing Time (1999)

Dos planos secuencia en pantalla dividida reproduciéndose al mismo tiempo. No es como el de Cibo Mato, pero este también está muy bien. ¿Cortes? ¡Claro que sí! Pero los directores tienen mucho arte para saber dónde cortar.

Sky – Some Kinda Wonderful (1999)

Los dos caminando contra viento y marea. Con muchas cosas pasando por detrás.

Smashing Pumpkins – Ava Adore (1999)

Un gran vídeo con buen montaje. Unos movimientos de cámara bruscos esconden los cortes manteniendo la continuidad del plano. Con algunos efectos digitales por ahí en medio que están muy bien.

¿Cuál es tu favorito?

Por favor, deja un comentario con tu videoclip favorito y, si ves que falta alguno, por favor, indícamelo.

Foto principal: Noom Peerapong